Cultural y tradicionalmente en Chile "nos dijeron y nos enseñaron" que había que respetar el mundo de los muertos y que la vida acaba con la muerte. Esas creencias dogmáticas, limitaron e invalidaron el flujo de energía entre la vida y la muerte.
Cuando las funciones vitales del Cuerpo cesan: una persona muere. Y al morir, el Cuerpo pierde 21 gramos: el peso del Alma.
El Alma es... el soplo vital que nos conecta con lo divino y superior.
Al morir, una persona NI VUELA, NI SE VA. Al morir una persona su Alma se queda por un tiempo en el lugar donde el Cuerpo falleció: si la Muerte fue repentina y brusca: el Alma queda "es shock" por al menos 7 días. En ocasiones: alguien percibe el olor de quien falleció trasladándose por la casa y en otras ocasiones alguien le percibe en sueños.
AYUDAR A QUIEN FALLECIÓ a transitar en la búsqueda de su paz para descansar: ese es mi trabajo. AMO ser un puente interpretativo entre lo humano y lo divino.
1. ¿Qué impide Q.E.P.D.? Que alguien llore por el difunto, que alguien lamente la partida del difunto, que alguien haya "guardado rencor" hacia quien murió; que el difunto hay sido incapaz de establecer diálogos, conversaciones y aclaraciones sobre diversos temas en vida.
2. ¿Qué "secretos" llevó consigo que no alcanza paz? Eso es aquello que impide Q.E.P.D.
3. ¿Qué es aquello que sigue inquietándole aún en el más allá? Eso es lo que resolveremos en canalización desde la Alta frecuencia del Amor y en conexión con las Leyes Universales.
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