"La enfermedad es un conflicto entre la personalidad y el Alma" (Bach)
"Las causas mentales de la enfermedad física y la forma metafísica de superarlas" (Louise Hay)
Crecí junto a mi Abuela materna, una mujer "enfrentada" a diagnósticos tajantemente convencionales y absolutamente dependiente de pastillas.
Desde mis 6 años y para ejercitar mis matemáticas, me "hicieron cargo de la responsabilidad" de los remedios de mi Abuela. Según mi mamá, si yo le daba las pastillas a mi Abuelita: aprendería a contar mejor y más rápido.
Sólo al crecer conscientemente pude observar los patrones implícitos inconscientemente en tal responsabilidad para una niña que creció "sin derechos".
Sólo al crecer conscientemente descubrí la fobia que fui generando ante los enfermos, las enfermedades, los diagnósticos y ante la medicina convencional.
Mi Abue padecía de: diabetes, hipertensión, cataratas y tomaba remedios para orinar, laxantes para depurar, pastillas para el corazón ((en caso S.O.S), para la presión... de mañana, a mediodía, de tarde y de noche.
Como niña: yo me preguntaba ¿CÓMO su estómago resistirá tantas pastillas? En más de alguna ocasión recibí un charchazo por andar preguntando y pensando "estupideces".
Sólo cuando observé que durante T.O.D.A.S las épocas del año: corría agua por mi nariz (agua sin moco) y que padecía de calambres nocturnos es que observé que "algo" no funcionaba bien en mi. En ese momento: tomé cartas sobre el asunto y visité al primer iriólogo. Él me habló de mi profunda tristeza, de mi incapacidad de relajarme y me recetó unos glóbulos. Fueron excelente respuesta. para "ese momento de mi vida".
Aún no descubría que mi Cuerpo y yo éramos DEMASIADO sintomáticos.
Crecí escuchando que: la diabetes era hereditaria y desde niña DECIDÍ que yo no era parte de esa herencia.
Inconscientemente, una parte de mí había renunciado a lealtades emocionales hacia el ADN.
Con el paso del tiempo fui comprendiendo que TODAS las enfermedades de mi Abue: eran emocionales y que la amarga sensación en muchísimas ocasiones de sus existencia había sido sumisa y genéticamente asumida por varios miembros de la familia.
A ti que lees: con profundo respeto te explico que EL SENTIR FRUSTRADO del Corazón = se vuelve un bloqueo, un estancamiento, una barrera que "parece ser asimilada" y evadida, más continúa pulsando en el sentir de tus consanguíneos durante 7 generaciones hacia arriba y durante 7 generaciones hacia abajo.
En otras palabras: cada lágrima que reprimas... alguien la llorará por ti.
"Somos uno y somos todos" algo parecido al efecto que produce el hongo Micelio que se expande por debajo del suelo al crear una red de conexiones entre todas las especies vegetales.
Desde hace años y gracias a la masificación de los MCM (medios de comunicación masiva), la sociedad ha normalizado el consumo de infinidad de productos que "parchan" temas emocionales no dialogados: poco se habla de causas y origen de temas tales como: soledad, abandono, humillación, desamor y precisamente ellos son la raíz de enfermedades tales como el alcoholismo, la depresión, la diabetes, las crisis y muchas otras más.
Podrás decretar muchos mantras: y estará bien para ti.
Podrás repetir muchas frases motivacionales: y estará bien para ti.
Podrás consumir muchas pastillas: y estará bien para ti.
Podrás leer y leer muchos libros de autoayuda y podrás escuchar muchos audios de buena vibra y de buena frecuencia y TODO estará bien para ti hasta que sea tú momento.
Sólo el día en que decidas AFRONTAR la realidad tras la búsqueda del origen de ESE malestar que se ha vuelto incomodidad y dolencia: sólo ese día, alcanzarás bienestar, buen dormir, calma, armonía y ahí lograrás disfrutar de "la verdadera normalidad".
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